Logo - Light / Gomarco

Colchones Gomarco S.L.
Ctra. Villena Km 3,5
P.O. Box 403
Yecla – Murcia – España
Cómo llegar

(+34) 968 79 00 90
info@gomarco.com

© 2024 — Gomarco.

Ritmo circadiano y los estados del sueño
ritmo circadianos

Ritmo circadiano y los estados del sueño

Los estados de sueño, y el ritmo circadiano.

Todos los seres humanos, presentamos una serie de hábitos y ritmos a nivel fisiológico y biológico. Estos hábitos y rutinas pueden o no estar influenciados por los cambios entre día y noche. El estado del sueño es el momento en el que nuestro cuerpo empieza a descansar y a poner en marcha toda la maquinaria del descanso.

Cuando dormimos es el momento que nuestro cuerpo sufre un cambio de etapas, NREM y REM, que van alternándose sucesivamente durante la noche. Dando pasos hacia procesos cerebrales complejos que nos permitirán preparar nuestro cuerpo para el siguiente día.

El momento en el que nuestro cuerpo entra en este estado de sueño, podemos encontrar diversos grados de profundidad, así como de modificaciones fisiológicas.

  • En esta primera etapa del sueño, es el primer momento donde nuestro cuerpo se adormila y entra en un estado de somnolencia, en esta fase desaparece de nuestro el ritmo alfa en nuestro encefalograma. Nuestro cuerpo mantiene un determinado tono muscular y apenas hay movimientos oculares.
  • La segunda etapa del sueño, es característica por bajar aún más los ritmos del encefalograma, es la fase donde nuestro cuerpo se prepara para entrar en el sueño profundo.
  • La última etapa de estas, es la que cierra la fase de sueño no REM (NREM), el tono muscular es menor. Empiezan a intervenir partes de nuestro cerebro, ya que es una de las fases más reparadoras en nuestro sistema. Esta fase se caracteriza por hacernos dar vueltas en la cama y cambiar de posturas.
  • Comienzo del sueño REM, conocido como etapa de sueño paradójico, que es cuando vuelve la actividad el encefalograma. En esta etapa, se observan movimientos oculares y el estado del cuerpo es similar al de la etapa de vigilia.

El sueño REM y NREM, se van alternando sucesivamente, pudiendo llegar a repetirse cuatro o cinco veces por la noche


A lo largo de un día nuestro organismo sufre diversos cambios de forma cíclica que regulan nuestras funciones fisiológicas. Los ritmos circadianos, por ejemplo, está asociado a los estímulos de luz que recibimos.

Nuestro ritmo circadiano no es más que la variación que los cambios periódicos que experimentamos a nivel fisiológico durante el día y la noche, como por ejemplo, presión sanguínea, niveles hormonales… Este ciclo de cambio se repite de manera indefinida y está influenciado de gran manera por el medio y las condiciones que nos rodean, como por ejemplo la cantidad de luz que recibimos, la estación o época del año. Nuestro cuerpo recibe todas estas señales y las pasa a una fase de procesamiento en el cerebro, que llamamos núcleo supraquiasmático (SCN) que haría la función de reloj, enviando órdenes que van sincronizando a las demás partes del cuerpo.

Si durante el día tenemos más hambre que por la noche, al igual que de día estamos más despiertos y con menos sueño, se debe a nuestra sincronización con nuestro ambiente.

Trastornos en los ritmos  

Alterar nuestros ritmos es alternar nuestro cuerpo y su funcionamiento, si hacemos variaciones en nuestro organismo podemos acabar generando afecciones a nuestro estado de salud.

Uno de los ejemplos más claro de la alteración de los ritmos es el famoso “jet-lag” que se produce cuando cambios rápidamente de zona horaria, sometemos a nuestros ritmos a cambios drásticos que desequilibran nuestro reloj biológico.

Los trastornos por trabajo, también son frecuentes en los desajustes de los ritmos biológicos. Aquellas personas que trabajan por las noches son más susceptibles de cambiar su ritmo circadiano.

Estos trastornos a veces pueden ser causados por factores externos y otras veces son causados por factores personales. Los factores que alteran los ritmos circadianos suelen ser:

  • Cambios frecuentes en los turnos de trabajo y horarios.
  • Descompensaciones horarias.
  • Cambios frecuentes en los horarios de acostarse y levantarse.
  • Daños cerebrales.
  • Cegueras o falta de exposición a la luz solar durante largos periodos de tiempo.
  • Consumo de algunas sustancias nocivas.

Ritmo circadiano y los estados del sueño



Abrir chat